jueves, 7 de junio de 2007

Atascado en una canción

Ya casi ni recuerdo esa música que tanto me marcó, esa imagen que me atrapó. Desde ese día no pienso en otra canción, tú, música es cada despertar que por un instante cesa tu canción en color pero los pájaros con su melodía me hacen recordar que jamás me pude levantar, tantas veces lo intenté pero era oírte y volver a recaer, tropiezo, tropiezo y no puedo escapar, tal vez sea que no tengo otra opción, que no quiere, que te quiere. El ritmo se repite, cada vez oigo más instrumentos, conozco más tiempos, más movimientos, tus movimientos, les silbo aún en la más absoluta oscuridad, tranquilidad que no es más que un recuerdo que olvidé recordar, los árboles te tararean bajo la luna sin luz, tu arpegio la robó y la devuelve con cada nota al viento que intento cazar. Días casi deseo distorsionar el armónico de tus ojos y olvidar esa canción, nadie me obligo a oír ni me ensordecerán para olvidar, pues la noche que te conocí con tu singular partitura no me avisaron y cada vez que remuevo mi memoria hundiendo las teclas con mis dedos, recuerdo porque lo hago.

No creo que sepas porque pero... gracias Jorge! xD

Sin final feliz

Zaratustra bajo de la montaña y dijo: no te dejes reemplazar, lucha por aquello que quieres y ten cuidado porque el perro y el gato se aliaron para acabar con el ratón. Los dos hermanos le mataron y lloraron. Los demás miraron para otro lado, cansados de ese cuento sin fin final feliz donde si quieres algo tienes que destrozarlo para hacerlo tuyo y poseerlo.